miércoles, marzo 15, 2006

FALSO PROMETEO

La sangre del muerto que escurre por mis labios,
los huesos condenados que corren por mis venas,
las espinas de incienso que arranqué con tus uñas,
la mezcla cortante de los cadáveres de Rodas,
se funden todos ellos sobre la existencia fatua.

¡Que venga la noche de luna muerta!
¡Que venga el fuego de Hades piamonte!
¡Muera el sueño y el ocre valle del viento!
Ya no queda nada y nada y nada.

Donde no queda más que tu ojo en mis manos,
nunca exististe más que en mis recuerdos,
fuiste lodo que ninguna mano modelo,
mi sueño ideal, mi esperanza ideal,
una moderna Eva,
que jamás nacerá,
y a la que siempre esperará,
este falso Prometeo.